javiii555
En esta última entrega de la trilogía Paraíso nos muestra a Melanie experimentando su adolescencia (empezar a tomar alcohol, el primer cigarro, conversaciones donde aparece la curiosidad del sexo) en un campamento para adelgazar. La nota principal es el enamoramiento hacia el médico del centro, lo cual dado el palpable interés mutuo, tiene a la protagonista con la esperanza (la que pierde al verse su aspecto físico) de ser feliz junto a él. En la película se espera que se muestre la debilidad del pretendido, aunque lo que se refleja es una tierna y a la vez cabal historia. Existen golpes de realidad, que es lo que pretende el director, y ello conlleva a la miseria, el desánimo y hacer hincapié en esa dura etapa de la vida. Para mi sorpresa, Seidl da a conocer una faceta comprensiva y compasiva. Se entiende lo que se quiere transmitir, pero pierde con respecto a Fe, y todavía más con Amor.