Un proyecto pionero en su propuesta. La honesta intención de Iago y su reducido equipo termina por superar eso mismo, la soledad a la que se ven abocadas este tipo de originales proyectos. Se colabora, se trabaja y se naturaliza un medio narrativo en personas con mucho que contar. Quizá eche en falta una mayor implicación de los participantes en algunos aspectos creativos (como el guion), al tiempo que se nota la falta de medio técnicos y humanos en algunos instantes; aunque esto último incluso realza todavía más el valor de la experiencia.
Un apunte para cerrar, se me hace un poco larga.
¡Enhorabuena a todos los mascareros!