

Alvaro
Me hacen gracia esos comentarios que aluden al 'ego de la autora' cuando a todas luces está claro que están frente a un documental autobiográfico. Por otro lado, me parece muy mal leído, dado que lo que ocupa la parte central de la mayoría del metraje es la figura del padre, del ser querido ausente, del que un día se le descubrió una faceta oculta y que en sí mismo retrata un tiempo complejo para según que elecciones personales. Me gustan ciertas pinceladas, como cuando revela la delicadeza y generosidad del padre, que lleva a su familia a esos mismos lugares que había vivido durante una etapa feliz, que más que un esfuerzo por revivir a mi me sonó a querer compartir algo bueno. O como cuando habla de la bisexualidad, que se alude a esa 'indecisión' (idea que no me cierra) entre dos bandos y monta una escena de un rodeo para establecer una metáfora de la doma de la propia sexualidad. En general me pareció muy honesto y auténtico, traza una panorámica muy sincera de una época.