No podríamos habernos quedado más contentos después de atender este año a nuestra cita festivalera neerlandesa de referencia, el IFFR (festival internacional de Rotterdam)  y poder llevarnos un puñado de sorpresas cinéfilas al bolsillo. Para esta edición, el festival ha decidido poner a disposición de la prensa e industria una suculenta programación 100% online debido al incremento de contagios relacionados con la variante Ómicron del Covid-19. 

Aunque hayamos visto una vasta cantidad de películas interesantes de las que iremos hablando estos próximos días, hoy estamos aquí para comentar el palmarés que fue anunciado recientemente, y es que hay mucha tela que cortar. 

Cabe decir que, con esta edición, el festival de Rotterdam se postula como uno de los bastiones más incontestables de la disidencia cinematográfica, aportando una programación inclusiva en la que destaca una palmaria actitud “queer” y etnográfica.

Tal es así que, el Tigre de Oro -máximo galardón del certamen- va este año para la cineasta paraguaya Paz Encinas ("La hamaca paraguaya") y su “Eami”, un film ubicado en la jungla que narra el via crucis de una niña indígena cuyo pueblo ha sido destruido a causa de una de las peores deforestaciones de la historia reciente. A medio camino entre la fábula metafísica y el cine denuncia, Paz Encina compone una delicia para los sentidos que va mutando hacia convertirse en un poderoso alegato anticolonialista. Mención especial para el diseño sonoro, que a través de un minucioso trabajo atmosférico supone un viaje con todas las de la ley al corazón de la jungla paraguaya. 

Por su parte, el jurado de la crítica ha decidido otorgar el premio FIPRESCI al cineasta chino Gao Linyang, director de “To love again”, un debut que indaga en las heridas políticas de la revolución cultural maoísta para comprender la desafección identitaria del presente. Linyang ejecuta un trabajo preciosista que respira la calma y el exquisito gusto para encuadrar que lo hermana con el estilo de Yasujiro Ozu. 

Además Linyang también obtuvo el Premio Especial del Jurado, estatuilla que comparte con el híbrido “Excess will save us”, un agrio comentario sobre la manipulación mediática que asola los estratos más vulnerables de la sociedad. 

Por último, en la sección Big Screen triunfó Mabrouk el Mechri, aplaudido autor de la irreverente “JCVD” y que desde entonces andaba un tanto desaparecido tras un periploalgo desafortunado por Hollywood. El marroquí vuelve a la carga con “Kung Fu Zohra”, una comedia negra sobre una víctima de violencia machista que trata de empoderarse y liberarse a través de las artes marciales. 

A la postre, el director de fotografía de cineastas como Apichatpong Weerasethakul o Luca Guadagnino Sayombhu Mukdeeprom fue galardonado de forma honorífica con el premio Robby Müller. Un palmarés completo que celebra la diversidad y fortaleza del cine internacional y que podéis descubrir en su totalidad aquí. Seguiremos informando sobre el resto de películas y cortometrajes de interés del resto de secciones en artículos venideros.